Estudié joyería y artes de los metales en la Escuela Tane de
Ploërmel. Luego, para perfeccionar mi conocimiento y técnica, realicé unas
practicas en Bruselas en el Taller de Eric Bellmans, bien reconocido en el
mundo de la alta-joyería y otras en París, en el taller de Claire Wolfstirn.
Después de ello, decidí probar suerte y encontrar inspiración en Barcelona,
donde trabajo y resido actualmente.
Utilizo principalmente la plata y el oro junto con
algunas piedras. Del diseño a la fabricación, todo está hecho por mí misma.
Cada pieza cuenta con una edición limitada y cuido cada detalle para que cada
una sea a la vez diferente y perfecta. Voy utilizando y probando todas las
técnicas propias de la joyería, dibujo, sierro, martillo, doy forma, limo,
estampo, perforo, pulo, araño, quemo, oxido… hasta extraer del metal lo que sirve para mi diseño.
Trabajo el metal buscando en sus mismas
propiedades y estructura la esencia propia de la naturaleza. No me interesa
reproducir elementos naturales sino re-interpretar sensaciones o emociones
in-concretas hacia ellos. Busco reavivar la sensibilidad de la gente hacia la
naturaleza en una época donde tantas cosas nos distraen de ello, reavivar el
instinto de protección hacia su belleza eternal y, sin embargo, tan efímera.